TREKKING AL MONASTERIO DEL NIDO DEL TIGRE – UN ASCENSO A LA FELICIDAD
Pasaporte Nómada
La caminata que asciende hasta el misterioso monasterio del Nido del Tigre, también conocido como Paro Takstang, es la más popular de todas las excursiones en Bután, y uno de los más bellos recorridos en todo el Planeta.
La imagen del monasterio solapado como una lagartija, y encaramado sobre la pared vertical de 900 metros de altura en la precordillera del Himalaya, ha copado multitud de postales y portadas de documentales, donde se describen algunos de los más misterioso y bellos rincones del mundo. Posiblemente, el Nido del Tigre, sea el monasterio más espectacular de todos los habidos y por haber.
Los orígenes de Paro Takstang, se remontan al siglo VIII cuando según mencionan las escrituras, el Gurú Riponche, tradicionalmente venerado como la segunda reencarnación de Buda, alcanzó este lugar para meditar hasta llegar a la iluminación.
Padmasambhava, sobrenombre por el que Riponche también es conocido en el país, fue el encargado de trasladar los principios y fundamentos del budimo tibetano hasta los valles y montañas que hoy constituyen el apacible reino de Bhután. De ahí la importancia que el monasterio haya adquirido durante los siglos, para la comunidad butanesa que a día de hoy, es la única en todo el mundo que se declara mayoritariamente budista.
Un estrecho sendero serpentea a través del bosque de pinos y rododendros, entre pequeños templos y refugios, molinos de oración y banderolas de colores, hasta llegar al lugar donde se alza el monasterio, solamente accesible a pie o a lomos de una mula. Se trata de un lugar muy especial, un lugar que transmite una serenidad fuera de lo común.
La caminata no comporta grandes dificultades, aunque la altura a la que se encuentra el monasterio, aproximadamente 3120 metros de altitud, puede entrañar problemas por falta de adaptación. Por este motivo, generalmente las agencias suelen dedicar el último día de viaje para la excursión, aprovechando que durante nuestra estancia en Bután nos hayamos podido aclimatar. Y cuando me refiero a las agencias, me estoy refiriendo a quienes organizan tu viaje por el país, porque en Bhután como ya sabrás, no está permitido viajar de manera independiente.
El lugar donde se encuentra tan célebre monasterio, se halla sobre la ladera de una montaña en el valle sagrado de Paro, a 10 kilómetros de la ciudad de Paro, al oeste del país. Pero antes de comenzar, me gustaría que conocieses el templo más antiguo que data en el reino de Bhután, el templo de Kyichu Lhakhang.
1. VISITA AL MONASTERIO DE KYICHU LHAKANG
Muy próxima al inicio donde comienza la caminata hasta el monasterio del Nido del Tigre, entre perdida, junto al margen del río Paro se encuentra la diminuta aldea de Kyichu.
Originalmente construido en el siglo VII por el emperador tibetano Songtsen Gampo, Kyichu Lhakhang fue visitado por Padmasambhava (Gurú Riponche), quien se cree que escondió algunos tesoros espirituales en él. Existe la creencia de que los dos naranjos en el patio de Kyichu Lhakhang dan frutos durante todo el año.
El colorido en el interior del templo es muy similar al de otros que se puedan visitar en en Bhutan. El tradicional aroma a incienso, ofrendas divinas, esculturas de Buda por todos los rincones, lámparas de manteca y como no, el misticismo intrínseco que mana en esta clase de lugares tan espirituales.
Para poder acceder dentro de los monasterios y templos en todo el país, hay que descalzarse y a diferencia de los que se hallan en otros lugares, como por ejemplo en Nepal, en el interior de éstos se encuentra terminantemente prohibido fotografiar.
En el exterior hay una pequeña stupa, lugar donde suponemos que se hallan las reliquias ocultadas por el Guru. Al otro lado, encontramos un pequeño refugio bajo cuyo tejadillo se alojan cinco gigantescas ruedas de oración.
Al igual que los molinillos de menor tamaño que encontraremos en las paredes del templo, éstos se encuentra repujados por el mantra Om mani padme hum, palabras que en sánscrito se traducen «¡oh, la joya del loto!».
Éste, es considerado por los monjes tibetanos uno de los mantras esenciales en el budismo, pues en él se encuentran condensadas todas las enseñanzas de Buda. Por ello mismo, es también uno de los mantras más conocidos en todo el mundo.
En consonancia con mis explicaciones acerca de la iconografía budista, el loto representa la pureza del cuerpo y del alma, y simbólicamente, se asocia con la figura de Buda y sus enseñanzas.
Los molinillos, al igual que las grandes ruedas de oración, hay que hacerlos girar en el sentido de las agujas del reloj, debiendo éstos efectuar tres giros completos. Con ello, el significado del mantra se expandirá en todas direcciones, al objeto de irradiar la compasión a todos los lugares del mundo. Si en alguna ocasión anterior has tenido la oportunidad conocer algún lugar con tradición budista, ya sabrás de lo que te hablo.
2. CAMINATA AL MONASTERIO DEL NIDO DEL TIGRE
El inicio a la caminata del Nido del Tigre tiene lugar junto a un aparcamiento, donde se amontan las furgonetas que trasladan a los turistas cargados de emoción.
Aquí, también es posible alquilar bastones para caminar y al regresar, podemos comprar banderas de oración, toda clase de parafernalia budista, cuencos tibetanos, rosarios o incienso natural de madera de sándalo, el utilizado para llevar acabo rituales de meditación. Al inicio, también es posible contratar la excursión a caballo, que finaliza en el merendero ubicado a mitad de camino.
El trayecto de ida y vuelta, es posible llevarlo acabo en aproximadamente cinco horas. La excursión merece tomarla con su debida calma, pues a menudo podrás encontrar pequeños templos y refugios, molinillos y ruedas de oración, banderolas enarboladas en la frondosidad del bosque, y un sinfín de detalles que otorgan a esta excursión un misticismo muy especial.
Polvoriento, el primer tramo del sendero se encuentra muy estrujado por el pisoteo de los caballos. Pero pronto, se comienzan a ver los primeros refugios canalizando las aguas cristalinas, que con energía manan desde las más altas cumbres del Himalaya.
Según se asciende entre el espeso bosque de robles, pinos y rododendros, los primeros esfuerzos son gratamente recompensados con unas hermosas vistas hacia las montañas cercanas y el valle sagrado de Paro, con la ciudad encajonada al fondo.
Esta imagen, la de las laderas de las montañas pobladas de bosques, es la más característica a lo largo y ancho de todo el país. La comunidad butanesa, persiste íntimamente vinculada a los orígenes ancestrales del ser humano. Preservar la naturaleza es uno de los pilares más intrínsecos en la sociedad, y uno de los motivos por los que Bután, mantiene un hermetismo de manera férrea con el exterior.
Un dato muy revelador sobre su interés en la conservación de la naturaleza, es que el 60 por ciento de la superficie del país se encuentra protegida por ley. Bután es un país donde tenemos muchísimo que aprender.
A lo largo de todo el camino se amontona cientos banderas de plegaria, cuales otorgan al lugar un ambiente contemplativo muy especial. En estos coloridos trozos de tela, se encuentran inscritos diferentes mantras de origen tibetano, y son frecuentemente enarboladas alrededor de los templos, así como en cumbres y pasos de montaña en todo el Himalaya.
Sus cinco colores representan los elementos en la cosmogonía tibetana, y se encuentran ordenadas de izquierda a derecha en un orden específico. El color azul simboliza el cielo y el espacio, el blanco el aire y el viento, el rojo el fuego, el verde el agua y el color amarillo simboliza la tierra.
Aunque ya las conocimos caminando por Nepal, nunca antes pudimos ver tantas acumuladas como en la subida hasta el Nido del Tigre. La energía que transmite caminar junto a ellas, percibiéndolas vibrar al suspirar de la brisa del Himalaya, resulta sencillamente espectacular.
En algunos lugares a lo largo de todo el camino, encontrarás molinos de oración que los fieles, mientras recitan sus mantras sagrados hacen rotar como parte del ritual.
Del mismo modo, al paso giramos todas las ruedas para propagar nuestra solidaridad y compasión a todos los pueblos del mundo. Créeme, todo esta clase de particularidades, consiguieron que nuestra excursión se convirtiera en una experiencia que para siempre recordaremos.
A mitad de camino se encuentra una cafetería mirador óptima para tomar un té y donde poder descansar. Aunque a lo largo de todo el trayecto es posible distinguir el monasterio como un pequeño punto confundido en la frondosidad del bosque, poco a poco, encaramado sobre el acantilado lo comenzamos ver cada vez más cerca. ¡Nuestra llegada al Nido del Tigre estaba muy próxima!.
Una vez en este lugar, de manera progresiva la subida se comienza a suavizar. Sobre todo en este último tramo de la caminata, izadas sobre las montañas se ven pequeñas residencias, así como algunos templos utilizados por los monjes del monasterio como lugar de descanso, o bien para ejercicios de meditación.
Después, el camino se transforma en una estrecha y desorganizada escalerilla protegida por una barandilla, desde donde por fin, comenzamos a ver de cerca el monasterio del Nido del Tigre. Desde este lugar en adelante, es donde mas personas se amontonan en todo el trayecto. Es imposible dar más allá de dos pasos sin parase a echar una foto.
El monasterio, pendido sobre el canto de un acantilado de 90 metros altura, es realmente espectacular. Resulta imposible no recapacitar sobre el modo en que lo pudieron construir en tan desconcertante lugar, tantos siglos atrás.
El semblante del monasterio, parece encajar a la perfección en la configuración de todo el conjunto encajado sobre el acantilado. Sin dudarlo de modo alguno, se trata de uno de los más privilegiados lugares habidos en todo el mundo. Es realmente espectacular, por vivir este momento, bien merece la pena haber pagado un costoso viaje hasta Bután
Continuamos por el sendero que desciende a través de las escalerillas, y que conduce hasta una estrecha pasarela de piedra. Aquí, se precipita una preciosa y pronunciada cascada, cuya base se encontraba medio congelada. Junto a ella, hay una pequeña construcción, Singye Phu Lhakhang, o Cueva del León de Nieve, un refugio usado para la meditación.
En este lugar, el colorido de las banderas de oración resulta mucho más intenso. Cuanto más próximos nos encontramos al monasterio, la escena es mucho más misteriosa y espectacular.
3. PARO TAKSTANG EL MONASTERIO DEL NIDO DEL TIGRE
El sendero, que se ve interrumpido por el monasterio y las construcciones que se hallan a su alrededor, continúa por las cumbres del Himalaya y atraviesa la frontera del Tibet hasta la ciudad sagrada de Lhasa. Éste, es el lugar donde se encuentra el palacio de Potala, residencia del Dalai Lama antes del exilio al norte de la India, tras la convulsa y genocida invasión china.
En ninguno de los monasterios del país está permitido usar la cámara de fotos, aunque en este lugar, son mucho más cuidadosos con ello. Antes de llegar, te obligan a dejar la mochila con todas las cosas en una taquilla. Por su puesto, también te obligan a dejar el móvil y la cámara de fotos.
El monasterio, es posiblemente el más importante de todos los construidos en el país, y se ha convertido en el icono cultural de Bután.
Fue construido en 1692 sobre la cueva Taktsang Senge Samdup, donde se dice que Guru Padmasambhava meditó durante tres años, tres meses, tres semanas, tres días y tres horas en algún momento del siglo VIII. Por ello, decidieron no escatimar en esfuerzos, a la hora de levantar tan preciosa edificación, literalmente suspendida sobre un acantilado de 900 metros de altura completamente vertical.
No mucho tiempo atrás, el 19 de abril de 1998, tuvo lugar un incendio en el edificio principal del complejo del monasterio, lugar donde donde se hallaban valiosas pinturas, objetos y estatuillas. Se cree que el incendio, fue causado por cortocircuitos eléctricos, o por las lámparas de manteca que iluminaban los tapices colgantes. Recientemente, las zonas afectadas fueron reconstruidas y por ello, durante la visita, encontramos multitud de extintores aupados sobre las paredes del monasterio.
De acuerdo con la leyenda, se cree que Padmasambhava (Guru Rinpoche) voló a este lugar desde el Tíbet en la parte trasera de una tigresa de Khenpajong. Si, volando a lomos de una tigresa, y es que las historias a cerca de la tradición budista, son de lo más excéntricas que te puedas imaginar.
El interior del monasterio, se encuentra decorado con cientos de imágenes donde se puede ver a Padmasambhava a lomos de la tigresa, matando todos los demonios habidos en el lugar.
El complejo, está formado por diversas edificaciones construidas en diferentes alturas, que son conectadas entre sí mediante escaleras o pasarelas. Durante la visita, es posible observar a los monjes mientras realizan ejercicios de meditación, o verlos desparecer tras las pesadas puertas de las habitaciones, luciendo sus rapadas cabezas y acicalados con túnicas de color.
En el interior de una diminuta sala que se puede visitar, a través de una oquedad tallada en el suelo que se halla junto a una pequeña stupa, es posible ver la cueva donde meditó Padmasambhava hasta llegar a la iluminación.
En el interior de las habitaciones, también abundan las ofrendas en forma de legumbres, frutas, hortalizas y otros alimentos, así como lámparas de manteca al pie de las espectaculares representaciones de Buda y Padmasambhava. Todo ello, visible de manera confusa entre una densa nieblina y la fragancia que rezuma del incienso mientras se consume.
Sin duda alguna, el Nido del Tigre es la joya de la corona en el reino más desconocido del Mundo. Para nosotros, supuso la guinda de una tarta muy especial. El colofón de nuestro viaje al país de la felicidad. El final de nuestra aventura a través del Reino de Bhután.
4. SEGUROS DE VIAJES PARA VIAJAR A BHUTÁN
A la hora de visitar Bhután resulta imprescindible contratar un seguro de viajes, ya que además de ser un requisito exigible para obtener el visado, siempre conviene cubrirse bien las espaldas en caso de accidente, enfermedad o para hacer frente a cualquier contra tiempo que pueda surgir.
Como siempre, recomendamos hacerlo de la mano de Inter Mundial, nuestra agencia de seguros de confianza, con quienes podéis disfrutar de un 10% de descuento solo por conocernos.
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3 Comments
Es un lugar hermoso, como puedo oagar rl viaje?
Hola estoy interesada en viajar en octubre del 2023 a Nepal y Buthan e India a conocer monasterios, el principal motivo de viaje conocer el Monasterio del Nido del Tigre en Buthan.
Les agradezco la información que me puedan enviar
Vivo en Colombia
Gracias
Clara
Hola Clara, gracias por tu comentario y bienvenida al blog.
Me alegro que te haya servido de ayuda, saludos y que disfrutes mucho mucho de tu viaje.